El próximo fin de semana vas a participar en una competición y necesitas trasladar tu bicicleta en el coche. O tal vez planeas unas vacaciones y no quieres dejar atrás tu compañera de aventuras. Ya sea que viajes con una bicicleta de montaña para explorar rutas off-road o con una bicicleta de carretera para rodar por puertos míticos, transportarla en tu vehículo puede ser un reto.
El principal objetivo es evitar daños en la bicicleta durante el trayecto y, al mismo tiempo, garantizar la seguridad al volante. Existen diversas formas de transportar tu bicicleta en el coche, cada una con sus ventajas según el tipo de bicicleta y la distancia a recorrer.
Antes de emprender el viaje, es importante tener en cuenta algunas normativas. Las bicicletas de montaña y bicicletas de carretera no pueden sobresalir más allá de la anchura del coche, incluidos los retrovisores. Además, es fundamental asegurarlas correctamente para evitar movimientos bruscos que puedan comprometer su estabilidad y la seguridad del vehículo.
En este artículo te explicamos las mejores opciones para llevar tu bicicleta de manera segura, ya sea dentro del coche, en un portabicicletas de techo, en el portón trasero o en una plataforma de enganche. También te daremos consejos sobre cómo proteger tu bicicleta durante el trayecto y dónde guardarla una vez que llegues a tu destino.
Viajar con tu bicicleta de carretera o bicicleta de montaña no tiene por qué ser complicado si tomas las precauciones necesarias. Planifica con antelación y disfruta del viaje con la tranquilidad de saber que tu bicicleta llegará en perfectas condiciones.
Ni en el maletero ni en la fila de asientos
En primer lugar hay que aclarar que hemos descartado el sistema de llevar la bicicleta en el interior del vehículo, ya sea en el maletero o acomodada en las plazas interiores con los asientos abatidos. Además de ser peligroso para los ocupantes, la bicicleta puede verse dañada.
En el techo
Es lo idóneo si tienes un coche tipo berlina. En principio es un buen lugar en el que colocarla, aunque deberás prestar mucha atención a los pasos subterráneos, garajes, etc., debido a la nueva altura de tu vehículo. Puedes elegir entre un sistema con el que se desmonta la rueda delantera y la bicicleta se sujeta por las punteras de la horquilla, o por otro que utiliza un raíl en el que se acopla la bicicleta al completo y el cuadro es sustentado por dos brazos. El inconveniente de este último es que el cuadro se puede arañar.
En el portón trasero
Barato y sencillo de instalar, este sistema se añade al vehículo por detrás y con él pueden trasladarse, según el modelo, hasta cuatro bicicletas. Eso sí, olvídate de la visibilidad a través de la luna trasera y recuerda que no podrás abrir el maletero con las bicicletas cargadas. Además, las bicicletas pueden dañarse por el contacto de unas con otras.
En un portabicicletas de bola
Aunque es un sistema más caro, es cómodo y permite acceder al maletero. Consiste en ensamblar un portabicicletas a nuestro vehículo que suele portar cuatro bicicletas. Recuerda que, para circular, debes desinstalarlo cuando esté vacío. Incorpora matrícula y luces propias.
En un remolque
Es el método más recomendable si tienes que transportar muchas bicicletas. El remolque se acopla al vehículo de forma segura, aunque es el modo que más afectará a tu conducción por el aumento de las dimensiones. Tienen matrícula y luces propias.
Consejos básicos
Para no ver comprometida tu seguridad y la del resto de vehículos, y evitar sanciones e inmovilizaciones por parte de los agentes de tráfico, recuerda que:
- Debes asegurarte de que la bicicleta esté bien agarrada, de lo contrario podrías provocar un accidente grave y también dañarla.
- Procura que tu visibilidad se vea lo menos comprometida posible.
No olvides que las bicicletas no pueden sobresalir nunca más allá de la anchura del coche, incluidos los retrovisores. Por arriba el máximo será de 4 metros, y por delante o por detrás del vehículo sí puede sobresalir, hasta un máximo del 10% de la longitud del automóvil. En este caso es obligatorio señalizar la carga con una placa V-20. Si las bicicletas ocupan todo el ancho del vehículo, hay que colocar dos placas, cada una en un extremo de la carga.
¿Cómo afecta a la conducción?
Transportar tu bicicleta en el coche conlleva una serie de efectos a la hora de conducir. Esto es lo que debes ter en cuenta:
Más consumo de combustible
Ten presente que conducir portando tu bicicleta incrementará el peso de la carga y aumentará la resistencia al aire, dos factores que inciden directamente en el aumento del consumo de combustible que hará tu vehículo. No se trata de un aumento que vaya a hacerte un agujero en el bolsillo, pero tampoco te lleves un susto si, al final del viaje, acudes a una estación de servicio y las cuentas no te salen.
Vigila los neumáticos
Con independencia del método de transporte que elijas, recuerda que la bicicleta o bicicletas aumentarán el peso del vehículo. Antes de emprender el viaje revisa la presión de los neumáticos para asegurarte de que es la correcta, o aumentarás peligrosamente la distancia de frenado e incrementarás el riesgo de pinchazos y reventones.
Evita los cambios bruscos
Con más peso y más dimensiones, tu conducción debe cambiar. Sé moderado, toma las curvas con precaución y, en los tramos urbanos, vigila los saltos en los badenes. Además de reducir la peligrosidad del viaje, reducirás tu factura en carburante y dañarás menos el medio ambiente.