No te vamos a engañar. Ningún sistema de seguridad es infalible, ni siquiera el mejor candado para bicicletas de carretera o de montaña. Con el conocimiento adecuado y las herramientas oportunas, un ladrón podría romperlo en un abrir y cerrar de ojos. Lo importante es hacer todo lo posible para dificultarles el trabajo.
Uno de los mejores consejos es usar dos candados con cerraduras de diferentes tipos y marcas. Es posible que un ladrón pueda romper uno de los candados, pero le resultará mucho más difícil superar el segundo, especialmente si es completamente distinto al primero. Esta doble seguridad complica la tarea y es más efectiva que confiar en un solo candado, por muy inviolable que parezca a simple vista. 
Principales tipos de candados para bicicletas
Particularidades al margen, existen cuatro grandes categorías de candados para bicicleta: los candados en U, los candados plegables articulados, los candados de cadena y los candado de cable. A continuación, analizamos algunas de sus particularidades, para que elijas el que mejor se adapta a tus requerimientos.
Candados en U
Podemos decir que el candado en U es el candado para bicicletas por antonomasia. Este tipo de candado, con un diseño que incluye un grillete grande y un travesaño reforzado con el mecanismo de bloqueo incorporado, lleva años siendo una de las opciones más populares entre los ciclistas, tanto de bicicletas de montaña como de bicicletas de carretera.
Su éxito se debe a que ofrece un excelente equilibrio entre portabilidad y peso, lo que lo convierte en una opción práctica para asegurar tu bicicleta. Además, muchos modelos vienen con un soporte que permite fijarlo fácilmente al cuadro de la bicicleta, lo que facilita su transporte. Los candados en U proporcionan un buen nivel de protección, haciéndolos ideales para quienes buscan una forma segura de proteger su bici.
En general, los candados en U disuaden al ladrón oportunista, especialmente cuando se utilizan correctamente para asegurar bicicletas de montaña o bicicletas de carretera. No es fácil acabar con estos candados debido a su robustez. Sin embargo, para aumentar aún más la seguridad de tu bicicleta, es importante mantener el candado alejado del suelo. Esto dificultará las operaciones del ladrón y evitará que utilice herramientas para forzarlo.
Un buen consejo es llenar el grillete tanto como sea posible para evitar ataques mediante palanca. Un candado en U con un grillete más corto puede ayudar en este sentido, aunque ten en cuenta que también dificultará el amarre de la bicicleta. Si decides usar dos candados en U de buena calidad, tu nivel de protección será excelente. Te recomendamos emplear uno para asegurar la rueda trasera y el cuadro, y otro para asegurar la rueda delantera y el cuadro de tu bicicleta.
Es cierto que los grilletes de metal sólido que conforman estos dispositivos les resta versatilidad en comparación con candados plegables o de tipo cadena. Por eso, combinarlos con un segundo candado es una excelente estrategia para proteger tu bicicleta de montaña o de carretera en cualquier situación.
Candados plegables
Si deseas una combinación de ligereza, portabilidad y resistencia en la que confiar durante paradas prolongadas, un candado plegable puede ser la solución ideal. Los candados plegables son los más portátiles del mercado. Guardados en su funda, ocupan poco más que la palma de una mano, por lo que son fáciles de transportar. Los más resistentes utilizan placas de acero endurecido de 5,5 mm. 
Debido a su grosor reducido, estas placas no brindan tanta seguridad como el grillete de un candado en U, pero su forma ancha y plana los hace resistentes a casi todos los ataques.
Candados de cadena
Si buscas un candado para una bici que permanece mucho tiempo aparcada, una cadena grande y pesada con eslabones reforzados es la mejor opción. Combinada con una cerradura potente, proporciona el más alto nivel de seguridad para tu bicicleta. Son algo engorrosas de transportar. El peso de las cerraduras y los eslabones reforzados hacen que el peso sea sustancialmente mayor que el de otros tipos de candado.
Una cadena pesada con eslabones reforzados ofrece un nivel de protección excepcional.
Un candado de cadena suele estar recubierto por una funda de tela para proteger el cuadro. Por la misma razón, los candados en U que hemos visto antes cuentan con un recubrimiento de plástico o caucho. Una ventaja de la cadena es que es adaptable y puede alcanzar cualquier rincón de tu bicicleta. Su forma también dificulta el ataque con herramientas tradicionales. Prueba a hacer palanca con una cadena y verás que no es nada fácil. También es difícil atacarlas con herramientas eléctricas e imposibles de cortar cuando la sección de sus eslabones mide 16 mm o más.
Candados de cable
Ligeros, flexibles y baratos. Los candados de cable están compuestos de hilos metálicos trenzados, escondidos bajo un recubrimiento plástico. La mayoría brinda niveles mínimos de seguridad y sólo deberías emplearlos en paradas breves, donde tu bicicleta no esté 100% desatendida. Es un hecho que los ladrones de bicicletas apuntan específicamente a estos candados. Algunos informes sugieren que hasta el 90% de las bicicletas asaltadas tienen un candado de cable como medida de seguridad. 
Una combinación de candado en U con un candado de cable es una excelente opción para quienes buscan asegurar ambos extremos de su bicicleta de manera ligera y eficiente. Los candados de cable para bicicletas suelen ser muy útiles, ya que algunos vienen con su propio mecanismo de bloqueo, ya sea con llave o con combinación numérica. Además, existen modelos con lazos en cada extremo, diseñados para usarse junto con otros tipos de candados.
Al elegir qué asegurar en tu bicicleta, es recomendable que te enfoques en proteger sus componentes más valiosos. Por ejemplo, puedes usar un candado de cable para asegurar la rueda delantera, mientras que un candado en U o un candado plegable puede ser ideal para proteger la rueda trasera y el cuadro. Sin embargo, es importante recordar que un candado de cable no debe ser tu única medida de seguridad, ya que las hebras de metal interiores pueden ser fácilmente cortadas con una cizalla.
Cómo candar tu bicicleta
Pues bien. Vistos los tipos de candados, pasamos a la acción. De poco sirve contar con un dispositivo a prueba de bomba si desconoces algunas nociones antes de dejar a tu bici sola y a la vista de todo el mundo. Compartimos contigo buenas y malas prácticas que debes tener en cuenta para una mayor seguridad. No son la panacea, pero ayudan.
Buenas prácticas al candar tu bicicleta
- Elige siempre un lugar concurrido para estacionar tu bicicleta. A los ladrones no les gusta actuar con público. Busca un lugar donde haya muchas más bicicletas y ubícala en medio, nunca en unos de los extremos.
- Amarra siempre tu bicicleta a un punto fijo, como un soporte aparcabicicletas o similar. Asegúrate de que ni la bici ni el candado se pueden liberar del punto de amarre sin el uso de la fuerza.
Al candar tu bici, procura hacerlo en un lugar concurrido donde haya más bicis estacionadas.
- Emplea un candado de calidad para tu bici y amarra la rueda trasera y el triángulo trasero del cuadro al punto de amarre.
- Siempre que puedas, emplea un segundo candado para asegurar también la rueda delantera (idealmente, también la parte delantera del cuadro). Para un ladrón es fácil desmontar la rueda y llevársela.
- Si usas varios candados, procura combinarlos de diferentes tipos (por ejemplo, un candado en U con uno de cadena; o un candado con llave con uno de combinación). Las vulnerabilidades difieren y el trabajo para el ladrón se amontona.
- Intenta ponérselo a los ladrones lo más difícil posible. Cuando asegures tu bicicleta, procura que mantener las cerraduras alejadas del suelo. De este modo, lo tendrán más complicado para hacer palanca para el uso de cizallas o mazas. Asimismo, ajusta las cerraduras lo más firmemente que puedas alrededor del cuadro. Dejar demasiada holgura facilita la labor del caco.
Malas prácticas al candar tu bicicleta
- Evita candar tu bicicleta, únicamente, con la rueda delantera. El ladrón podrá soltarla y llevarse el resto de tu bici en cuestión de segundos. Una rueda delantera solitaria amarrada a un portabicis es una imagen demasiado habitual.
- Tampoco candes tu bicicleta junto a otra bici.
- Evita también candar tu bici por el cuadro únicamente. Dejarás demasiado espacio libre dentro del candado, haciéndolo más vulnerable. Además, tus ruedas estarán desprotegidas.
- Por último, antes de abandonar tu bici, asegúrate de que tienes correctamente colocados tus candados y de que están bien amarrados.
