Saltar es uno de los recursos técnicos de la bicicleta de montaña más complicados de ejecutar, pero a la vez se trata de una técnica que es necesario aprender y contar con ella para sortear con éxito determinadas situaciones. Puede resultar muy útil para superar obstáculos u otras irregularidades del terreno de forma rápida y efectiva.
Aunque a veces se peca de considerar el salto como una excentricidad estética o de cara a la galería, lo cierto es que saltar correctamente es un recurso técnico del ciclismo de montaña que hay que dominar si lo que quieres es tener un buen manejo de tu bicicleta en todo tipo de situaciones.
Mediante un salto puedes salvar cortes de terreno, cortados, cambios bruscos de rasante u obstáculos como rocas y troncos. Todos ellos son obstáculos que puedes encontrarte en cualquier ruta de mountain bike, no sólo en tramos de enduro. En una pista forestal llana, por ejemplo, te puedes encontrar algún bache o socavón inesperado. Incluso también en el asfalto.
Así pues, te damos algunos consejos muy prácticos para que afrontes con seguridad el paso de estos obstáculos o saltos con las ruedas despegadas del suelo. Situaciones normales de cualquier recorrido clásico de ciclismo de montaña. En este artículo no te hablaremos, por tanto, de saltos imposibles de descenso,
bike park o
pump track, sino de cómo ejecutar la técnica del salto con tu bicicleta en rutas y situaciones convencionales.
Los 4 pasos básicos para saltar correctamente con tu bicicleta de montaña
Despegar las ruedas del suelo y elevarte en el aire para sortear obstáculos e irregularidades del terreno no es una técnica aislada, sino un conjunto de ellas. Para aprender a saltar correctamente te recomendamos realizar los siguientes pasos:
1. Mantén brazos y piernas flexionadas
La postura sobre la bicicleta en el momento del salto es crucial para realizarlo de forma segura. Agarra firmemente el manillar, flexiona ligeramente los codos y las rodillas y echa ligeramente el cuerpo para atrás hacia el eje trasero. De esta forma desplazarás tu peso y tu centro de gravedad.
2. Modera la velocidad
El salto se empieza a preparar siempre de 3 a 5 segundos antes de llegar al obstáculo. En esta zona previa, además de poner en práctica el paso uno, tienes que mantener una velocidad moderada pero constante que no haga descontrolar tu bicicleta ni tu equilibrio por la inercia. Toca el freno trasero siempre antes de llegar al salto y olvídate de usar el delantero. Ten presente que de lo que se trata es de realizar el salto a una velocidad adecuada y constante, no de hacerlo a la máxima velocidad posible.
3. Controla el impulso vertical
En el momento de elevarse desde el suelo impúlsate junto a tu bici de forma moderada, hacia arriba, usando los brazos y piernas como si fueran muelles. Bastará un pequeño empujón para que la bici se levante ayudada por la inercia o por la propia pendiente del terreno.
Nunca frenes justo en el momento en que la bicicleta regresa al suelo
4. Equilibra las ruedas al caer al suelo
Este pequeño impulso te permitirá equilibrar la inclinación de ambas ruedas para que la recepción del salto (el momento en el que caerás al suelo otra vez) se haga con ambas tocando el suelo a la vez, lo que evitará desequilibrios o que la bici salga disparada hacia adelante.
Ayúdate de tus brazos y piernas flexionadas para amortiguar el impacto y, seguidamente, comienza a frenar para adecuar la velocidad o parar en caso de que sea necesario. Nunca frenes durante o justo en el momento de la recepción.
Tipos de saltos en función del obstáculo
Estos cuatro pasos que hemos visto antes son los pasos generales en la ejecución de cualquier salto con una bicicleta. Pero ante determinados obstáculos existen variaciones de alguno o varios de ellos para adaptarse a cada situación. Te explicamos cómo saltar en los obstáculos más frecuentes de una ruta de mountain bike.
Bunny Hop, el salto multiusos del mountain bike
El
Bunny Hop o 'salto del conejo' es un tipo de salto muy recurrente en este deporte y que te permite superar obstáculos de forma segura sin ralentizar tu ritmo o velocidad. Se trata de elevar desde el suelo la bicicleta con la fuerza de tu propio cuerpo, sin la ayuda de una rampa. En otras palabras, un salto de altura pero montado en bicicleta.
Es muy útil para superar socavones en medio de un camino, troncos o raíces y elementos similares. Su técnica de ejecución implica un mayor impulso corporal en el momento de elevar la bici, ya que no tendrás ninguna ayuda externa para impulsarse.
El Bunny Hop te permitirá saltar baches u otros pequeños obstáculos sin perder el ritmo
El salto implica una primera elevación de la rueda delantera, seguida de la trasera para mantener la bici en el aire y superar el obstáculos. La recepción deberá hacerse al mismo tiempo con ambas ruedas.
Salto de rampa natural
En muchas ocasiones te toparás con alguna ondulación brusca del terreno en forma de rampa, cuya forma más rápida y efectiva de superar será con un salto. Para ello habrá que recurrir más que nunca a los cuatro pasos básicos del principio, moderando la fuerza del impulso en el momento del salto.
A la hora de la recepción es muy probable que ésta no sea plana. En ese caso lo recomendable es valerse del cuerpo para adecuar la caída de las ruedas a la pendiente del firme, echarlo ligeramente para adelante y así caer con las dos al mismo tiempo. No te inclines demasiado sobre la rueda delantera. En caso de desequilibrio, es más seguro caer primero con la trasera que con la frontal.
Salto de cortados o drops
Por último, hay que detenerse en uno de los pasos u obstáculos más complicados y que más miedo generan en una ruta de mountain bike. Se trata de los cortados o
drops, cortados repentinos del sendero que generan una caída vertical hasta la continuación del propio sendero.
La técnica de salto en este punto es un poco diferente a la del salto convencional o el
bunny hop. Aquí cuenta más tener máxima confianza, moderar la velocidad y el impulso del salto deberá ser casi testimonial. Dejarse caer y equilibrar al mismo tiempo la bicicleta para una recepción simultánea de ambas ruedas es el secreto de un buen salto de cortado.
En este práctico vídeo de Bikecheck puedes aprender varios trucos para perder el miedo a los cortados y saltarlos con confianza y facilidad:
https://youtu.be/LZxmUDIVuuk
Consejo final: practica en entornos seguros
La técnica del salto no es sencilla de dominar y, como hemos visto, existen varios tipos de obstáculos o rampas que requieren de algunas variaciones en la técnica. Lo mejor para aprender y acostumbrarte a saltar es hacerlo con obstáculos sencillos para empezar: baches y rampas de poca altura y cortados sencillos con recepción plana.
Poco a poco puedes animarte con rutas que incluyan saltos de mayor dificultad. Si por cualquier circunstancia no te ves capaz o seguro de hacerlo bien para a tiempo, examina unos minutos el estado del salto o cortado, su recepción y visualiza la trazada. Esto te hará ver la situación más clara y armarte de confianza para atravesar el obstáculo.
También te recomendamos hacer sesiones o rutas de técnica con saltos acompañado por un
biker más experimentado. Éste te podrá marca la velocidad y trazada, preocupándote solo de adoptar la postura adecuada para realizarlos de forma controlada y segura.