Ajustes esenciales para mejorar la suspensión de tu bici sin salir de casa
No son pocos los bikers que practican mountain bike habitualmente y no prestan atención a los ajustes ni al mantenimiento del sistema de suspensión de su bicicleta de montaña. Es un error grave, que es imperdonable si es por dejadez, ya que con dedicar unos pocos minutos a la semana o cada quince días a este aspecto, es posible extraer todo el potencial de las suspensiones, hacer que la bicicleta funcione mejor e incrementar así el rendimiento. En este artículo vamos a centrarnos en explicarte cinco ajustes básicos y de mantenimiento de tus suspensiones, tanto de la horquilla como del amortiguador (si tienes una MTB de doble suspensión). Recuerda que, además de estos ajustes, es recomendable realizar un mantenimiento y limpieza profundos de las suspensiones cada año, bien por tu cuenta si cuentas con las herramientas y conocimietnos para ello o realizarla en un taller especializado. Este plazo se acorta en el caso de suspensiones de largo recorrido (enduro y descenso), que será de seis meses.
El SAG o prehundimiento
Ajustar el SAG o prehundimiento de cualquier suspensión es esencial, prácticamente obligatorio, si quieres que funcione con garantías. Se trata del tanto por ciento de la barra de amortiguación que se introduce en la botella (que es la barra inferior más gruesa en el caso de la horquilla, o el manguito del aire en el caso del amortiguador) al subirse en la bicicleta. Ajustar la suspensión para tener más o menos SAG determinará el comportamiento de la misma al rodar. Mayor SAG o prehundimiento implica una suspensión más blanda y absorbente y menos SAG más dura y rígida.
Pasos para ajustar el SAG de tu suspensión
Los ajustes los deberás realizar en función de tu peso, recorrido de la suspensión (o carrera, en el caso del amortiguador) y modalidad practicada. Cada marca y modelo de suspensión tiene sus tablas de SAG y presiones de aire recomendadas, muy prácticas como punto de partida para realizar el ajuste. Aunque podrás personalizar estas medidas en función del tipo de terreno de la ruta o tu estilo de conducción. Un ejemplo son las tablas con los porcentajes de SAG y presiones de Fox.
Paso 1: herramientas para ajustar el SAG
Para ajustar el SAG de tus suspensiones sólo necesitarás una bomba específica de suspensiones (no vale una para inflar las ruedas) y una cinta métrica. Esta última no es necesaria si el recorrido o barra de amortiguación viene con guías de SAG pintadas (habituales ya en suspensiones de gama media). Si la suspensión no tiene una goma atada a la barra, deberás atar una brida, sin apretarla muy fuerte, para que te sirva de guía.
Paso 2: abre los diales de compresión
Deja abiertos al máximo los diales de compresión (de color azul generalmente) y de rebote (rojo) de la suspensión.
Paso 3: súbete encima
Vístete con tu equipación habitual, incluyendo zapatillas, casco y mochila de hidratación si la sueles llevar. Esto te permitirá determinar el SAG correcto en función de tu peso real durante la ruta o entrenamiento. Súbete a la bici en estático, apoyándote en una pared o ayudándote de otra persona, que sujetará la bicicleta por el manillar.
Paso 4: comprueba cuánto se ha hundido la suspensión
Una vez subido y sentado sobre la bicicleta, la suspensión se hundirá parcialmente debido al peso extra de tu cuerpo. Es el momento de bajarte de ella y examinar cuánto se ha hundido. Para ello puede serte útil una cinta métrica.
Paso 5: calcula el porcentaje de SAG
El SAG de la suspensión será la distancia entre el tope o retén de la barra de amortiguación y la goma o guía. Si tienes una horquilla de XC de 100 mm de recorrido y la barra se ha hundido 15 mm, su SAG será del 15%. En el caso del amortiguador, habrá que atender a la longitud de la carrera (longitud de la barra de amortiguación). Por ejemplo, en un amortiguador para cross country con una carrera de 52 mm, si se hunde 10 mm el SAG será de un 19%. La fórmula es sencilla: divides la distancia que se ha hundido la barra entre el recorrido total de la suspensión y lo multiplicas por cien.
Paso 6: Ajusta el SAG a tu gusto
Si quieres más o menos SAG, dependiendo de las recomendaciones del fabricante o de tus propios gustos, deberás introducir la bomba de suspensiones en la válvula de cada suspensión e inflar o eliminar la presión. Una vez ajustada, vuelve a subirte a la bici para comprobar el ajuste.
Paso 7: Repite este proceso una vez al mes
Recuerda apuntar en una nota el porcentaje de SAG o las presiones de cada una de tus suspensiones para recordarlas de cara a los ajustes periódicos. Como norma general se recomienda revisar el SAG y la presión cada mes.
La compresión de la suspensión
Buena parte de las horquillas y amortiguadores para bicicletas de montaña poseen diales de ajuste de la compresión, que girándolos en una u otra dirección aumentan o disminuirán la dureza de la misma, partiendo de una presión de aire determinada. Por ejemplo, Fox posee en su horquilla 32 para XC un dial de color azul instalado en la parte superior de la barra derecha con tres posiciones: abierto (open), medio (medium) y bloqueado (firm). Girando el dial hacia una u otra posición obtendremos una suspensión más blanda para obstáculos o terreno más irregular (open), más dura o incluso completamente bloqueada. Esta última posición es ideal para terrenos completamente llanos y firmes, como por ejemplo tramos de asfalto o pistas sin baches. Otra opción de dial de ajuste de la compresión son los mandos de bloqueo remoto desde el manillar, desde el que se puede abrir o cerrar la suspensión sin necesidad de quitar las manos del manillar para girar el dial. El diseño y funcionamiento de este dial es diferente según la marca o modelo de suspensiones. RockShox, el otro gran fabricante mundial de suspensiones junto con Fox, cuenta con opciones de dial por clicks de varias posiciones (8 ó 10) y también de mando de bloqueo remoto. Asimismo, en los modelos de disciplinas más radicales, como el enduro, este dial se divide en dos, teniendo uno para ajustar la compresión a baja velocidad (comportamiento durante el pedaleo) o a alta velocidad (obstáculos y saltos).
El rebote
Otro ajuste básico de la suspensión es del rebote o velocidad de retorno del recorrido de la suspensión. Al igual que la compresión, en las horquillas y amortiguadores de enduro y descenso existe el rebote a baja velocidad, que regula el comportamiento en el pedaleo, y alta velocidad, para obstáculos y saltos. Asimismo, el rebote tiene su propio dial de ajuste con un determinado número de clicks, de más lento a más rápido. Está situado generalmente en la parte inferior de la botella en el caso de la horquilla y en la parte superior del manguito del aire en el amortiguador trasero. De esta forma puedes ajustar la velocidad del rebote a tu gusto.
La progresividad o tokens
También es posible realizar desde casa un ajuste de la progresividad de la suspensión, aunque esta maniobra es algo más compleja que las anteriores. La progresividad hace referencia a la rapidez con la que la suspensión se endurece, dependiendo esta de la presión de la cámara de aire. Esta progresividad se puede modificar introduciendo o quitando unas piezas de plástico que dependiendo de la marca o modelo tienen un grosor u otro, llamadas espaciadores de volumen o tokens. A más tokens, mayor será la progresividad de la suspensión y antes se endurecerá. En cambio, si la suspensión aprovecha todo el recorrido y hace tope, es que es muy blanda y lineal. Será necesario entonces introducir un espaciador para así aprovechar gradualmente todo el recorrido. Así puedes evitar quedarte en una situación de absorción de punto muerto y comprometer el control de la bicicleta. Añadir o quitar tokens en la horquilla es una operación sencilla si cuentas con un juego de llaves de tipo Allen y otra hyper glide de cassette. En este vídeo de Core Bicycle explican cómo se hace paso a paso: https://youtu.be/cpCEBsZKIms En cambio para el amortiguador será necesario desmontarlo casi por completo para instalar los tokens, por lo que recomendamos llevarlo a un profesional.
Ajuste de suspensiones de muelle
Los ajustes y modificaciones explicados hasta ahora en este artículo se refieren a suspensiones de aire, las más extendidas actualmente en bicicletas de montaña. Pero también existen montajes con suspensiones de muelle, especialmente los amortiguadores traseros de bicicletas de enduro y descenso. Ambos son igual de válidos, aunque su comportamiento, mantenimiento y ajustes son diferentes. En el caso del muelle también es posible ajustar tanto el SAG, a través de una tuerca con la que comprimiremos más o menos el muelle, como la compresión o el rebote. La suspensión de muelle también tiene diales como los de aire, que controlan la entrada y salida de aceite de un cartucho hidráulico, calibrando así la velocidad y la dureza de la amortiguación. En este vídeo Fox explica gráficamente cómo funcionan este sistema a través de su célebre amortiguador X2: https://youtu.be/oiANiwCzqZE Además, el amortiguador de muelle, aunque no cuenta con el ajuste casi milimétrico del aire, es sin embargo más fácil de mantener y no presenta los problemas de variación de la presión del aire por las condiciones meteorológicas. Por eso es una alternativa a valorar si deseas una amortiguación eficiente para practicar trail o enduro y no quieres pasar cada año por las más engorrosas y caras puestas a punto de la suspensión de aire.