En este vídeo casero puedes hacerte una idea del revuelo que se armó en las calles de Asmara con motivo del regreso del equipo nacional. [embed]https://www.youtube.com/watch?v=47YsCq-HyLk[/embed]
No era la primera vez que Eritrea vivía momentos ciclistas épicos. En 2015, Daniel Teklehaimanot y Merhawi Kudus se convertían en los primeros ciclistas del África Negra en participar en el Tour de Francia. El primero de ellos, incluso, vistió el maillot de líder de la Montaña durante varias jornadas. Los eritreos se frotaban los ojos. De vuelta a casa, fueron también recibidos como héroes nacionales. Con la victoria de Girmay en Flandes, Eritrea da un paso más en su crecimiento como potencia ciclista en el Cuerno de África. La bici forma parte de su identidad. Su autoritario régimen lo sabe y lo emplea como propaganda; una forma de presentarse al mundo de una forma amable y dinámica. [caption id="attachment_7220" align="alignnone" width="900"] Girmay, maillot blanco tras una etapa de la París-Niza 2022. Imagen: ASO / Alex Broadway[/caption] El ciclismo es el deporte rey en Eritrea. Sólo el fútbol es capaz de atraer tanta pasión, pero la afición se vino abajo cuando la selección nacional desertó al completo aprovechando un viaje a Uganda. Es raro el fin de semana que las calles de Asmara, la capital, no se cierran al tráfico por la celebración de alguna carrera ciclista. Esta pasión de los eritreos por el ciclismo proviene de la intensa influencia italiana. Desde 1890, y hasta la Segunda Guerra Mundial, Eritrea fue colonia italiana. En los años 30, los grandes de la época ya viajaban a este país. Eran los tiempos de los Binda, Bartali y compañía. De hecho, en la lengua local (tigrinya) “bicicletta” es un término de uso cotidiano. En los años 60, los eritreos eran los únicos ciclistas del África Negra con presencia en los Juegos Olímpicos, si bien competían bajo bandera etíope, que en aquella época controlaba el país. [caption id="attachment_7222" align="alignnone" width="900"] Girmay, en el Tour de la Provenza (2021) - Imagen: Marianne Casamance.[/caption] En sus entrevistas, Biniam Girmay admite que sueña con una victoria en una Milan-San Remo. De momento, ya ha puesto una pica en Flandes. También le gustaría parecerse a Peter Sagan. Quién sabe si no será el eslovaco quien mire con envidia el palmarés de este ciclista, con toda una carrera por delante.
¿Quieres revivir la gesta lograda por Biniam Girmay y la enorme celebración de todo su equipo en Bélgica? [embed]https://www.youtube.com/watch?v=8gaHXMZqJkI[/embed]