Mañana te puede pasar a ti. Sales en bicicleta tranquilamente a entrenar o a disfrutar de una mañana rodando por la carretera y un conductor te arrolla.
En el mejor de los casos caes al suelo y te levantas con unos raspones. En el peor, pierdes la vida.
Y eso que tú circulabas sin cometer ninguna infracción, sin cambiarte de carril sin mirar, sin cruzarte por el medio de la calzada, sin interponerte entre ningún vehículo. Simplemente vas pedaleando por la carretera y un coche te lleva por delante.
Probablemente sea un accidente como tantos otros en los que influyen un montón de factores: el estado de la calzada, la falta de visibilidad… O puede, como sucede tantas veces, que el conductor en cuestión haya cometido una imprudencia. Iba mirando el WhatsApp al volante, no respetó la distancia de seguridad al adelantar, invadió tu carril o conducía borracho.
Según datos de la DGT, en el 60 por ciento de estos accidentes el ciclista no comete ninguna infracción; es el conductor quien incumple alguna norma.
No son casos aislados. En 2015 fueron atropellados más de 700 ciclistas en las carreteras españolas. Cincuenta y ocho de ellos perdieron la vida y otros 652 resultaron heridos graves. Desde 2011 el número de heridos tras sufrir un accidente mientras circulaban en bicicleta ha aumentado en 7 de cada 10 provincias españolas.
Hace unas semanas una furgoneta se llevó la vida de todo un campeón del Giro de Italia, Michele Scarponi. El ciclista italiano entrenaba para preparar su participación en la ronda italiana cuando fue atropellado.
El pasado fin de semana otros dos ciclistas murieron tras ser embestidos por un coche en la localidad valenciana de Oliva. La conductora dio positivo por alcohol y drogas.
Ayer fue Chris Froome, ganador de tres Tours de Francia, quien denunció un atropello mientras entrenaba en Beauseleil (Francia). Así lo publicaba en su perfil de Twitter: «Acabo de ser embestido a propósito por un conductor impaciente que me ha tirado al pavimento. Afortunadamente estoy bien. La bici está destrozada. El conductor se ha dado a la fuga».
Just got rammed on purpose by an impatient driver who followed me onto the pavement! Thankfully I’m okay 🙏 Bike totaled. Driver kept going! pic.twitter.com/o7FT4iXsAo
— Chris Froome (@chrisfroome) 9 de mayo de 2017
Desde el pelotón piden penas más duras para los causantes de este tipo de siniestros. Ciclistas como Alejandro Valverde, Contador o Purito Rodríguez así lo han manifestado públicamente. Colectivos como la Mesa de la Bicicleta también instan al Parlamento a cambiar cuanto antes la legislación. También existen iniciativas como la de Anna González, quien recogió 200.000 firmas para pedir que se cambie el Código Penal y el atropello a ciclistas sea tipificado delito.
Está claro que algo hay que hacer. Por un lado el endurecimiento de las sanciones. Por otro, una mayor labor de concienciación sobre cómo actual al volante cuando hay una bicicleta en la carretera. Algo falla cuando la impaciencia por no esperar un minuto a adelantar a un grupo de ciclistas cuesta vidas.
No se libra nadie. Profesionales y aficionados, todos podemos acabar cualquier día en la cuneta víctimas de un conductor impaciente, borracho o imprudente. Mañana te puede pasar a ti.
